Cualquier día es bueno para un regalo

Celebremos San Hoy. Ya está bien de esperar a San Valentín para regalarle algo a tu pareja o a que llegue San José para agasajar a papá. Rompamos con la esclavitud que nos marca el calendario y hagamos el regalo que sea a quien sea y, sobre todo, cuando sea.

Se trataría de sorprender a alguien con un detalle que no se espere. Es por eso que, ya que lo tomamos por sorpresa en cuanto a la fecha, vamos también a tratar de sorprenderlo por lo que se refiere al regalo en sí.

Regalos

La primera de las ideas se refiere a un regalo tierno, socorrido cuando se trata de quedar bien, por ejemplo, con una pareja en San Valentín y no hemos sido capaces de comprar con tiempo. Pero todo un “detallazo” el día de San Hoy: un osito de peluche vestido con una camiseta en la que habremos solicitado que se imprima nuestro mensaje.

Para la ocasión vale desde el socorrido “Te quiero” hasta “acuérdate de mí”, o cualquier frase que tenga algún significado para ambos. A este respecto, ya adelantamos que en próximos artículos hablaremos de frases impresas o grabadas.

Volando a ras del suelo

Pero ahora prima la originalidad. Y original, a la vez que emocionante puede ser una vuelta a un circuito pilotando un Ferrari –o dejando que un profesional lo haga por nosotros-. Por doscientos cuarenta y nueve euros podemos sentir un v8 de cuatrocientos noventa caballos acelerando hasta casi los trescientos kilómetros por hora en un circuito de competición.

Claro que no todos los días podemos gastarnos casi doscientos cincuenta euros y, como estamos hablando de obsequios “de diario”, vamos con uno más económico y a que, a su vez, quien lo reciba va a sacar más utilidad. Por entre quince y veintiún euros podemos personalizar la carcasa de un móvil y regalársela a quien queramos, para que, cada vez que llame o lo llamen vea esa foto o lea ese mensaje que le recuerde que alguien lo quiere.

La magia de la fotografía

La última de las sugerencias, aunque caben muchas más, se refiere a otro objeto útil y personalizado: un cojín con una fotografía impresa: por unos veinticinco euros, podemos regalare la misma foto de la carcasa de párrafo anterior u otra diferente a esa persona con la que queremos celebrar que hoy es la víspera de mañana.

Como siempre, la lista queda abierta: no hemos hecho más que insinuar un camino que tú has de seguir, sobre todo si quieres tener un detalle con quien ha sido tan amable de existir.