¿Desde cuándo las familias reales están reñidas con los regalos horteras? ¿Por qué razón no se puede utilizar la imagen de la monarquía para crear una serie de productos-souvenir? Eso debió pensar el primer chino (porque esto sólo puede imaginarse y llevarse adelante en las más enloquecidas fábricas del Imperio del Dragón, que ya es decir) al que se le ocurrió poner la cara de la Reina de Inglaterra en un plato de pared…
Ojo, que cada uno es muy libre de comprarse y regalar lo que quiera. Yo por ejemplo tengo un amigo, normal por lo demás, dedicadísimo al mundo de los recuerdos con motivos reales. Nada le hará más ilusión que un juego de té con la corona danesa, un llavero con la foto de una infanta (uy, cuando se casaron, qué explosión de productos) o algo parecido.